El amor, un concepto tan complicado que en ocasiones puede causar dolor de cabeza, recuerdo que un par de años atrás cuando mis ganas de salvar al mundo estaban a flor de piel decidí que para mi tesis de titulación tomaría como eje al amor… Si, leyeron bien, el amor fue tema y motivación para escribir línea tras línea de lo que se llegaría a convertir en una de mis grandes pasiones en la vida.
Resulta, que después de haber leído un poco sobre el tema de la mano de autores poderosos como Bahuman y Fromm me enfrentaba al primer dilema real de mi vida adulta, al menos eso creía yo, después de digerir sus palabras mi ardilla interna se dio a la tarea de revolverlo todo para hacerme dudar sobre lo que yo consideraba y creía que era el amor, fácilmente me di cuenta que todo lo que entendía del tema salía de las novelas clásicas de Jane Austen, yo era una víctima del romanticismo.
En fin… no vengo aquí a platicarles de mi tesis, pero si están interesados con gusto les cuento de ella en otro momento, hoy quiero hablar de ese aspecto romántico del amor del cual no podemos escapar, Hollywood y las películas mexicanas nos tienen secuestrados con la idea del felices para siempre… Aún cuando la felicidad solo dura unos 90 minutos, como buena chica cursi me he sumido en la desesperación y el alboroto emocional del enamoramiento pasional, ese que te hace desgarrar las vestiduras para pasar de sentirte la última coca en el desierto a la pobre muñeca fea de Cri-Cri.
Tropezón tras tropezón y parece que no he aprendido nada, se equivocan aprendí muchísimo y el panorama cambia bastante, en los últimos 7 años de mi veintitantos he tenido la oportunidad de hacer práctica de prueba y error (aún sigo en ella) para llegar al resultado que más me convenza, así es el amor dejarse llevar como pingüino en tobogán, disfrutar de lo bueno y aprender de lo malo.
Sí, los activistas veganos de piel bronceada vestimenta de hípster barba de leñador son guapísimos e interesantes, los rojillos “chairos” salvadores de la revolución e hijos de “El che” te dan un aire de rebeldía y libertad, los niños bien de la colonia que amán a su mamá y planean una vida con perros y con jardín son los más estables…
Todos tienes algo positivo que ofrecer, pero lo bueno empieza cuando comienzas a darte cuenta de sus defectos y de todas aquellas cosas que realmente no quieres en tu vida, no deseas vivir rodeada de perros y comiendo pastito, no te agrada la idea de terminar en el torito por haber cerrado el Paseo de la Reforma y mucho menos tienes ganas de hacerte las uñas en compañía de tu querida suegra.
¡Ya no más por favor!, muy seguramente todos hemos pasado por ese momento en el que queremos gritar y salir despavoridos… en palabras de la Dra. Amanda Lozano (Personaje ficticio del cine mexicano) hemos despertado del “Apendejanamoramiento”, ¿Si es tan malo por qué seguimos ahí?
Es simple y sencillo, ¡somos masoquistas!, ok no, esa no es la razón (aunque parezca que sí) la razón es que somos seres humanos que necesitamos afecto y aceptación, por eso mismo he llegado a coincidir con los comentarios de Scarlett Johanson los seres humanos no estamos hechos para la monogamia, nuestra naturaleza nos pide más y más en formas tan distintas que nos lleva confundirnos y sentirnos culpables, al menos yo no los juzgo, no todos los días queremos comer sopa ¿Por qué querríamos estar con una misma persona siempre?
Dejemos de pensar demasiado y comencemos a disfrutar plenamente, cada forma de amor es única, cada amor en la vida nos aporta algo distinto, vale completamente la pena dejarse arrastrar por esa absurda necesidad de amar y ser amado.
En conclusión, por más irracional que nos llegue a parecer el amor es un mal necesario que debemos vivir, conocer la fascinación amorosa, el mal de amores, el amor a primera vista, el poli amor, etc. Solo la experiencia nos dará de la vida una nueva perspectiva e irá delimitando o bien quitando de la lista aquella forma en la que deseamos ser amados.
En esta oportunidad, en esta primera vez en la que puedo escribir sobre aquello que me mueve me dejo llevar libre simplemente por el hecho de que “amo amar el amor”. Por ahora dejaré un top 5 de los libros que debes conocer sobre este escabroso tema y un top 5 de películas que te dejarán un sabor cursi y analítico sobre cómo vemos y cómo nos vemos en el amor.
Espero que lo disfruten y no leemos en la siguiente ocasión.
Libros:
El arte de amar, Erich Fromm
La más bella historia del amor, Dominique Simonnet
El amor líquido, Zygmunt Bauman
Lecciones de amor, Francesco Alberoni
El enamoramiento y el mal de amores, Alberto Orlandini
Películas:
500 days of Summer
Two Nigth Stand
Hes just not that into you
Crazy Stupid Love
Something's Gotta Give
